Ciertamente algo raro ocurría en la Alemania de Hitler, sus científicos conocían demasiados adelantos técnicos para la época en la cual Vivian.
Tanto los americanos, como los rusos, se apropiaron para ellos, tanto de los científicos como de la información alemana sobre tecnologías muy avanzadas que los nazis poseían.
Alemania ya disponía de televisión en el año 1.936, disponía de la más avanzada industria farmacéutica, desarrollo los Me-262 (avión a reacción), también desarrollo los V2, unos misiles de largo alcance…
Al parecer, los alemanes disponían de una tecnología, que les permitió el desarrollo de unos aviones dotados de motores antigravitacionales, cuyo nombre clave era Vril y Haunebu.
Viktor Shauberger, científico alemán era contrario a la utilización de motor de explosión y defendía el uso del motor de implosión.
El principio del motor de implosión se basa en la espiral logarítmica.
El combustible que utilizaban los alemanes para su motor de implosión, se cree que era agua mezclada con aire comprimido utilizando la fuerza de un motor eléctrico a unas 20.000 rpm.
La fuerza del motor de implosión se desarrolla por los giros cada vez más pequeños de la espiral logarítmica, basándose en el cambio de velocidad del agua y la compresión del agua dentro de la espiral.
Cuando el agua estaba en su máximo nivel de compresión, gracias a las fuerzas centrífugas, se iniciaba una segunda espiral logarítmica, que giraba en sentido contrario a la primera, la cual descomprimía el agua, retornándola a la bomba, que de nuevo la retornaría a la primera espiral, iniciando un nuevo ciclo.
A esto lo denominaron vórtice dinámico.
El 24 de junio de 1.947 a las 14.00 horas, el piloto norteamericano Kenneth Arnold, perteneciente a la organización Airafox, avista cerca del monte Rainer unas extrañas aeronaves, que le parecieron platos deslizándose sobre el agua, a una velocidad de 2.400 km/h, a esos platos que se movían a esa exorbitante velocidad en esos tiempos, es a lo que hoy día les llamamos ovnis.
Curiosamente ese mismo año, 1.947, los americanos fundan la CIA (debió ser casualidad).
En ocasiones, han sido avistados unos gigantescos OVNIS con forma de cigarro, al parecer coinciden con los planos del proyecto Andrómeda (Andromeda-Gerät), que no se sabe si se construyo antes o después de la guerra, si fue construido después de la guerra, se supone que su fabricación se realizó en Neuschwabenland, con forma de cigarro y unos 130 m de longitud.
También los aliados sufrieron la compañía de unas curiosas bolas plateadas transparentes, que interferían los sistemas electricos de sus aviones y no había forma de despistarlas, a estas bolas, los alemanes las llamaban Kugelblitze.
Algunos mantienen que los nazis, con su tecnología de los OVNIS, aun sobreviven fuera del suelo alemán y están preparados para atacar, en la futura caída de la civilización occidental.
También se afirma que los nazis tienen una base en la Luna, hace unos sesenta años, se cree que con esas naves no tienen la más mínima dificultad para viajar a la Luna o a Marte, donde algunos autores afirman que hace decenios tienen bases los alemanes.
Otra cosa curiosa, durante la misión del Apolo 11, cuentan que unos radioaficionados captaron un transmisión de radio del Apolo 11 con Houston donde comunicaban un avistamiento de unas naves espaciales mucho mayores y con una tecnología muy superior.